El Papa Francisco desea que las puertas de Notre Dame acojan a todos
La catedral de Notre Dame de París fue reconstruida durante cinco años tras el incendio de 2019. El Papa había informado que no podrìa asistir a la ceremonia de reapertura.
Fuente: https://www.diariopopular.com.ar/
El Papa Francisco envió un mensaje a la ceremonia de reapertura de la catedral de Notre Dame de París, tras la reconstrucción por el incendio de 2019, en la que invitó a que sus puertas acojan a todos «con generosidad y libertad».
«Notre Dame pronto volverá a ser visitada y admirada por una inmensa multitud de personas de todas las condiciones, orígenes, religiones, lenguas y culturas, muchas de ellas en busca de absolutos y sentido a sus vidas«, escribió el papa en su mensaje, leído durante la ceremonia.
Añadió que sabe que «las puertas estarán abiertas de par en par para ellos» y que se les acogerá «con generosidad y libertad, como hermanos y hermanas«.
El Papa estará representado en las ceremonias de reapertura de la catedral de Notre-Dame de París por el nuncio apostólico en Francia, el arzobispo Celestino Migliore.
En una entrevista exclusiva con los medios vaticanos, el representante del Papa en Francia expresó la estima de Francisco por los fieles y el pueblo de Francia, un país con «una asombrosa paradoja» entre una secularización avanzada y una verdadera fecundidad espiritual.
El Santa Padre había sido invitado a participar en la inauguración, pero en unas declaraciones a la prensa durante un viaje internacional confirmó que no iría.
Sin embargo, el próximo domingo acudirá a Córcega para participar en una reunión sobre religiosidad en el Mediterráneo y se reunirá con el presidente francés, Emmanuel Macron.
Francisco también quiso saludar «a todos aquellos, en particular a los bomberos, que trabajaron con valentía para salvar este monumento histórico«, y aplaudió «la decisión de las autoridades públicas, así como la gran generosidad internacional que contribuyó a la restauración«.
«Este impulso es una señal no solo de un apego al arte y a la historia, sino aún más ¡y qué alentador es eso! la señal de que el valor simbólico y sagrado de un edificio así todavía es ampliamente percibido, desde el más pequeño hasta el más grande», agregó.
El Papa se refirió al «notable trabajo de los numerosos profesionales que han invertido, dando generosamente lo mejor de sí mismos, para devolver a Notre Dame su esplendor«, tras cinco años y medio de restauración.
«Es hermoso y reconfortante que los conocimientos de antaño se hayan conservado y mejorado sabiamente. Pero es aún más hermoso que muchos trabajadores y artesanos hayan dado testimonio de haber vivido esta aventura de restauración con un auténtico enfoque espiritual«, señaló.