Esta vez, una persona que circulaba por el cruce de las calles San Luis y Sarmiento, en pleno centro de la ciudad, detectó a un perro dentro de un vehículo que permanecía estacionado y con las ventanas cerradas. Enseguida dio aviso a los efectivos policiales que realizaron un operativo para rescatar al animal.

Cerca de las 16.20, los oficiales de la Policía de Rosario arribaron al lugar y decidieron esperar algunos minutos por si el dueño de la camioneta se presentaba. Al ver que no aparecía, decidieron iniciar el operativo de rescate y romper el vidrio de una de las ventanillas, ya que la mascota presentaba algunos signos compatibles con un posible caso de asfixia, tales como fatiga y respiración agitada.

El martes pasado, vale recordar, un perro murió asfixiado en el auto de su dueña, luego de que lo dejara estacionado en el centro rosarino y se fuera a trabajar. Según informaron las fuentes oficiales, el vehículo estaba cerrado, con las ventanillas altas, por lo que provocó que el animal muriera asfixiado.

El auto quedó estacionado en la calle Corrientes al 680, desde donde algunos testigos llamaron al 911 al notar que pasaban las horas y la mascota, de nombre “Coco”, continuaba solo en el interior del auto. No obstante, para cuando las autoridades se presentaron en el lugar, el can ya se encontraba muerto.

Minutos más tarde llegó la dueña del perro. Las cámaras de televisión del Canal 3 de Rosario captaron el momento en vivo: se la ve desesperada y, apenas abrió la puerta, la mujer rompió en llanto. “Me olvidé, no lo dejé encerrado”, explicó la implicada a una señora que la increpó. “Lo dejaste solo, tan solo que se murió”, replicó la vecina.

Frente a lo ocurrido, la mujer quedó detenida y fue trasladada hacia la Comisaría 2° de Rosario, donde permaneció unas hasta que la liberaron por la noche. La acusaron de haber infringido la Ley Sarmiento, que prevé penas de 15 días a un año contra quien “infligiere malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad a los animales”.

Qué dice la ley argentina sobre estos casos

Ante situaciones similares, la legislación ampara las acciones que busquen salvar la vida de un animal:

El Artículo 34 inciso 3 del Código Penal reconoce el estado de necesidad como justificación para romper el vidrio de un auto si esto evita un daño mayor, como salvar a un animal en peligro de muerte.

La Ley 14.346 de Protección Animal establece que el maltrato y la crueldad animal son delitos penales, y quien deje a un animal en estas condiciones podría enfrentar una denuncia judicial.