Un joven de 21 años, alertó a través de una llamada telefónica que tenía secuestrado a un bebé. Tras la investigación, se pudo determinar que se trataba de una mentira y quedó detenido a disposición de la Justicia.

Fuente: https_www.lamañanaonline.com.ar

El Comando Superior de la Institución movilizó toda la estructura: móviles, efectivos, recursos informáticos y al juez de turno, comprobándose que se trataba de una broma de mal gusto.

El hecho se registró a las 17:00 horas de este sábado, cuando un efectivo de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional Uno, recibió un llamado telefónico de un sujeto que advirtió que tenía secuestrado a un bebé y solicitaba una ubicación para entregarlo.

En la comunicación, se escuchaba de fondo a un bebé y desde un primer momento se manejó el caso como si fuera real, indicó la Policía.

De inmediato se inició una exhaustiva investigación, poniéndose en movimiento toda la estructura policial. En poco tiempo se determinó la identidad del sujeto, que reside en la localidad de Palo Santo.

Ante la gravedad de la situación planteada, el caso se informó al Juez de Instrucción y Correccional de Turno, Dr. Guillermo Omar Caballero y fiscal de turno; también se dispuso que se informe al Juez y el fiscal Federal con asiento en la provincia, activándose de inmediato el protocolo de búsqueda.

Se realizaron las coordinaciones entre el jefe de la Unidad Regional Uno (UR-1) y su par de la UR-2 con asiento en Pirané, quienes dispusieron el inmediato despliegue del personal de la Comisaría Palo Santo, Delegación Departamento Informaciones Policiales.

A través de un despliegue, los policías llegaron hasta una vivienda de Palo Santo y se detuvo al sujeto que realizó la llamada.

Se trataba de un hombre de 21 años, quien expresó que sólo fue una broma telefónica para un amigo, pero ingresó de manera errónea los dígitos y terminó llamando a otra persona.

Con la colaboración del personal de la Comisaría local y la Delegación Policía Científica, se realizaron las diligencias procesales en la casa y se procedió al secuestro de un teléfono celular.

El detenido y el secuestro fueron trasladados a la dependencia policial, donde se notificó al sujeto de su situación procesal y quedó alojado en una de las celdas, a disposición de la Justicia.

Posteriormente, el domingo en horas de siesta con una orden judicial, se llevó a cabo dos allanamientos; primero en la vivienda ubicada en el barrio Parque Industrial de la localidad donde no se constataron elementos de interés para la causa.

Después se realizó en la vivienda del barrio Primavera, allí se entrevistaron con la madre del menor y la misma presentó a los policiales las documentaciones que tenía de su hijo.

Todos los detalles del caso y el resultado de las requisas domiciliarias, se puso a conocimiento del juez que interviene en la causa.