“Cada golpe al régimen sionista es un servicio a toda la humanidad”, afirmó Alí Jamenei. Y consideró que “toda nación tiene derecho a defender su país y territorio ante el agresor”, en una referencia a los asesinatos de Nasrallah y un general iraní en ataques israelíes en Beirut el sábado, y del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, en julio en Teherán.

Sobre la milicia chií libanesa, dejó en claro que «Hezbollah y su líder heroico y mártir son la esencia de las virtudes y la identidad históricas del Líbano«.

Alí Jamenei llamó a una unidad islámica

Durante su discurso, el líder supremo llamó al mundo musulmán a unirse ante el enemigo, «cuya política es divide y vencerás». Y recordó que “la política del Corán es que las naciones musulmanas deben estar unidas”, mientras que subrayó que el “enemigo de Irán es el enemigo de Palestina, Líbano, Irak, Egipto, Siria y Yemen”.

También señaló a Estados Unidos como culpable de las tensiones en Oriente Medio. “Estados Unidos busca el control de los recursos de la región a través del régimen de Israel”, aseguro. El ataque de Hamás contra Israel del 7 de octubre de 2023 fue legítimo, según su visión.

“La tormenta de Al-Aqsa fue una medida legal e internacional y un derecho legítimo de los palestinos”, quienes en su opinión tienen “el derecho a hacer frente a cualquier enemigo que haya destruido su casa y su vida”.

Tras el discurso procedió a dirigir su primer rezo colectivo de los viernes desde 2020, cuando lo hizo tras la muerte de Qasem Soleimaní, exgeneral al frente de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución iraní (IRGC), asesinado por EE.UU. en Irak.