Se cumplen 30 años del atentado a la AMIA

Se cumplen 30 años del atentado a la AMIA

El ataque a la mutual judía dejó un saldo de 85 muertos y más de 300 heridos. Como todos los años, hoy se realiza un acto frente a la sede de la entidad.

La sede de la AMIA destruida por el atentado. Foto NA.

Fuente: https://www.diariopopular.com.ar/

Este jueves se cumplen 30 años del brutal atentando a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). Y como ocurre cada 18 de julio se hará un acto frente a la nueva sede de la entidad, del que participarán funcionarios, artistas y familiares de las víctimas.

El acto central se realiza este jueves a las 9:53 (hora en la que ocurrió el atentado) en la sede de la AMIA, ubicada en Pasteur 633, donde se renovará el pedido de justicia en una ceremonia organizada por las autoridades de la mutual, representantes de la comunidad judía y familiares de las víctima.

En la misma también estarán presentes el presidente Javier Milei, las autoridades del gobierno de la Ciudad y los presidentes de Uruguay y Paraguay, Luis Lacalle Pou y Santiago Peña.

Habrá cortes totales en las siguientes calles: Pasteur, entre Viamonte y Tucumán; Tucumán, entre Azcuénaga y Uriburu; Corte total en Lavalle entre Azcuénaga y Uriburu; Y Viamonte, entre Azcuénaga y Uriburu. Las interrupciones comenzaron el miércoles y se mantendrán hasta este jueves a las 14.

Por otra parte, este jueves entre las 5 y las 12 habrá cortes totales en Azcuénaga, entre Córdoba y Corrientes. Y en Viamonte, entre Azcuénaga y Paso.

Una historia que aún duele

En el barrio porteño de Balvanera, una Trafic blanca convertida en coche bomba estalló contra la entrada del edificio de la AMIA, cuando faltaban siete minutos para las diez de la mañana del lunes 18 de julio de 1994, jornada que a partir de ese momento se convirtió en una de las fechas más negras de la historia argentina.

Desde entonces, 30 años han pasado sin que la investigación judicial ni las acciones de los distintos gobiernos hayan arrojado resultados satisfactorios para los familiares de los 85 muertos y los 300 heridos, que provocó ese ataque terrorista.

En total, 77 víctimas estaban dentro de la sede de la mutual judía y otras 18 en la vereda o en edificios aledaños al momento del atentado, cuyos responsables siguen impunes.

Aunque la comunidad judía de la Argentina es la más numerosa de América latina y una de las principales del mundo, el atentado fue tomado por la colectividad, la Justicia y los gobiernos como un ataque a la sociedad argentina toda.

La iniciativa del gobierno de la ex presidenta Cristina Kirchner para acordar con Irán el interrogatorio en Teherán a los acusados terminó rodeada de polémica, rechazo, inconstitucionalidad y resultados nulos.

Ahora, el gobierno del presidente Javier Milei intenta implementar el juicio en ausencia para avanzar con el proceso que apunta a los iraníes.

El 17 de marzo de 1992, la comunidad judía ya había sido objeto de otro atentado, cuando una camioneta Ford F-100 explotó frente a las puertas de la Embajada de Israel, que entonces se ubicaba en el barrio porteño de Retiro, y como consecuencia de lo cual murieron 27 personas y más de 100 resultaron heridas.

Dos años después, la Asociación Mutual Israelita Argentina se encontraba organizando los preparativos para el festejo del primer centenario de su creación.

La organización había sido fundada grupos de inmigrantes judíos y tenía por objetivo brindar ayuda y asistencia a las personas de esa comunidad que planeaban radicarse en el país.

El viernes 15 de julio de 1994, tres días antes de la explosión, una Traffic blanca fue estacionada en la playa de estacionamiento Jet Parking, a tres cuadras de la sede de la mutual, ubicada en Pasteur 633 e inaugurada en 1945.

A las 9:53 del lunes 18, ese vehículo, cargado con 400 kilos de un explosivo de nitrato de amonio, TNT y nitroglicerina amonal, se estrelló contra el edificio de la calle Pasteur.

La explosión produjo un cráter de seis metros de profundidad y daños materiales por 15 millones de pesos/dólares, mientras que la onda expansiva dejó sin agua y sin luz a las manzanas vecinas y destruyó decenas de propiedades de la cuadra.

Desde ese momento, sin novedades judiciales a la vista, sobre el atentado a la AMIA se produjeron miles de artículos periodísticos y decenas de libros, ensayos y videos, así como centenares de testimonios orales, expresiones artísticas, imágenes y actividades educativas.

Cada 18 de julio a las 9.53 en la reconstruida sede de Pasteur 633 se hace sonar la sirena que buscar fortalecer la memoria y redoblar el reclamo de justicia.