Netanyahu rechazó la resolución de la CIJ: «El pueblo judío no es conquistador en Cisjordania»

Netanyahu rechazó la resolución de la CIJ: «El pueblo judío no es conquistador en Cisjordania»

El primer ministro israelí se mostró en contra del fallo de la Corte Internacional de Justicia. «Ninguna decisión falsa en La Haya distorsionará esta verdad histórica», afirmó.

Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel. Foto: Reuters.

Fuente: https://www.canal26.com/

Benjamín Netanyahu rechazó la opinión emitida por la Corte Internacional de Justicia sobre la ocupación israelí de Cisjordania, que calificó como ilegal.

«El pueblo judío no es conquistador en su propia tierra», respondió el mandatario en un comunicado difundido por su oficina.

«Ninguna decisión falsa en La Haya distorsionará esta verdad histórica, del mismo modo que no se puede cuestionar la legalidad de los asentamientos israelíes en todos los territorios de nuestra tierra», zanjó el líder israelí.

De esta forma, Netanyahu negó la ilegalidad de la ocupación israelí en Jerusalén Este (reconocida como territorio de Palestina según las fronteras de 1967, que Israel se anexionó definitivamente en 1980), y Cisjordania, a la que el líder político se refirió como «Judea y Samaria», remitiéndose a los términos bíblicos que habitualmente utilizan los colonos.

Estas afirmaciones no casan con el fallo de la Corte Internacional de Justicia, que consideró, que las políticas israelíes de asentamientos y sus prácticas de explotación de los recursos naturales en los territorios palestinos ocupados «violan el derecho internacional».

Por ello, la CIJ instó a Israel a «devolver la tierra y otras propiedades inmuebles» incautadas a los palestinos desde que comenzó la ocupación ignorando las fronteras reconocidas por la ONU en 1967.

La palabra de Katz al respecto

El ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, lanzó un comunicado en el que calificó la opinión de la CIJ como «fundamentalmente deformada, unilateral y equivocada».

Katz, al igual que Netanyahu, apeló a los «derechos históricos del pueblo judío en la tierra de Israel», y acusó a la Corte de estar alejada del presente al no tener en cuenta las amenazas de seguridad que vive Israel (en referencia a Hamás, Irán y «otros elementos terroristas») o el Holocausto.

«El Estado de Israel se adhiere al Estado de Derecho y está comprometido con el derecho internacional», dijo, afirmando que el país hará «lo necesario para proteger a sus ciudadanos de acuerdo al derecho internacional».