«Una banda de motochorros que tiene atemorizados a los vecinos de Palermo y Villa Crespo; conformada por al menos tres motos y seis delincuentes, goza de tal impunidad que roba en la zona y luego se estaciona en la misma esquina. Este lunes le robaron el teléfono celular al sobrino menor de edad de un muchacho que es vecinos y sabe dónde estaban. Se les acercó y como se puede ver en el video les pide amablemente que le devuelvan el teléfono robado. No termina la frase que uno de los delincuentes, todavía suelto, lo ataca impunemente y lo destroza a golpes. El muchacho está grave. Sin embargo este es solo uno de los 6.500 episodios terriblemente violentos, desarrollados por bandas de criminales en moto», dijo el doctor Javier Miglino, experto en Derechos Humanos y Protección de la Niñez y Director de Defendamos Buenos Aires.
Bastian Escalante, de 10 años. «La gente asiste azorada a una nueva imagen de motochorros y muerte. En este caso hubo un tiroteo en la localidad de Wilde, en el sur del Conurbano bonaerense en momentos en que un nene de 10 años salía con su mamá de un club de barrio al cual había ido a entrenar. Mientras cruzaba la calle se produjo un feroz tiroteo entre los delincuentes que estaban robando en motos y un policía que estaba de civil. En ese momento, el chico, completamente inocente se enfrentó a la muerte porque recibió dos balazos, uno en la espalda y otro en el tórax; es decir lo balearon de frente y de espaldas. Una barbaridad que le pone la piel de gallina a la gente que debe salir con sus hijos a comprar, a la escuela o a entrenar como el caso Bastian, el nene asesinado en las últimas», dijo Miglino.
‘Motocolombianos’ en acción. «Las bandas de asesinos y ladrones colombianos son conocidas en Estados Unidos de América, América Latina, España, Francia e Italia. Llegan, roban, matan y se van. Hace 48 horas, seis de estos delincuentes originarios de Cali y Bogotá (Colombia), atacaron a una pareja que había retirado dinero de un banco en el porteño barrio de Recoleta. Tres fueron detenidos. Tres están prófugos», dijo Miglino.
Un caso grave en Ciudad de Buenos Aires. «Hace un par de semanas, una pareja que salía de retirar dinero de un banco, fue víctima de un violento robo al salir de la entidad ubicada en la calle Marcelo T. de Alvear al 2000, en el barrio de Recoleta. En ese momento cuatro delincuentes colombianos los atacaron. Todos habían llegado en dos motos de contramano. Los ‘motocolombianos’, famosos en toda América Latina por robar y ejecutar personas a tiros desde los vehículos, rompieron las ventanillas del auto, robaron el dinero y huyeron en diferentes direcciones. Tres de ellos resultaron detenidos y uno se encuentra prófugo. El caso quedó bajo la investigación del Juzgado Nacional de Instrucción en lo Criminal N° 42, a cargo del Dr. Fernández, que ante la Secretaría N° 106, del doctor Carovano, dispuso la detención de los colombianos», dijo Miglino.
Las embajadas alertan. «Las embajadas de los Estados Unidos, Inglaterra y Rusia alertan a sus nacionales que si visitan la Ciudad de Buenos Aires por ánimo turístico o en plan de negocios o estudios, eviten utilizar el teléfono celular en la vía pública. Los robos se multiplican y la violencia de los miembros de la mafia de los celulares manchados con sangre que utilizan motos para robar y para matar, primero atacan y luego preguntan», dijo Miglino.
«El mayor objetivo de los motochorros y los motoasesinos siguen siendo los ‘celulares manchados con sangre’; tal como lo han bautizado en Defendamos Buenos Aires. Se trata de los aparatos robados con violencia que le causan graves lesiones a sus dueños o incluso la muerte y luego reactivados en cuevas de la calle Libertad, la avenida Pueyrredón en Balvanera o en la esquina de Mendoza y Cabildo en pleno barrio de Belgrano, dónde son vendidos como si nada hubiera ocurrido», agregó el abogado Javier Miglino.
Bajo esta línea, el director de la citada ONG explicó que «Avenida del Libertador, desde el 2000 hasta el 3000; es decir entre los barrios de Belgrano y Nuñez, es una verdadera zona liberada para los motochorros». «Roban todo lo que está a la mano. Desde una chica que va caminando y hablando por el teléfono celular, hasta una pareja que está tomando algo en cualquier esquina. Nadie camina tranquilo porque todo el mundo sabe que los asesinos en moto viajan armados con armas de fuego y cuchillos y que roban sin un objetivo fijo y son muy violentos. Por ese motivo, cualquiera puede resultar víctima y terminar herido o muerto», lamentó.
«Ante la presencia de motochorros o motoasesinos en el barrio, si quieren denunciarlos pero temen represalias, pueden hacérnoslo saber en el correo ongdefendamosbuenosaires @ mail.com Haremos el reclamo con absoluta reserva de identidad», concluyó Miglino.