Cónclave en el Vaticano: las claves que rodean la sucesión del papa Francisco

Cónclave en el Vaticano: las claves que rodean la sucesión del papa Francisco

Solo pueden votar los cardenales menores de 80 años, pero hay varios que incluso tienen edades más jóvenes que las que tenían Francisco o Benedicto XVI cuando asumieron el papado. Serán 133 los cardenales electores, y 108 los nombró el propio Jorge Bergoglio.

Los cardenales Luis Antonio Tagle junto a Pietro Parolin, dos de los máximos candidatos a suceder al papa Francisco. Foto: Reuters/Yara Nardi.

Fuente: https://www.canal26.com/

Para entender cómo se estará desarrollando el próximo cónclave en la Capilla Sixtina que elegirá al Papa que reemplazará a Francisco, hay que saber que si bien la mayoría de los 133 cardenales que votarán en los próximos días fueron elegidos por él, muchos de ellos no se conocen entre sí, y cuentan con ideas muy diferentes sobre cuáles deberían ser los destinos de la Iglesia, por lo que se estima que la elección del nuevo pontífice será muy reñida.

El detalle señala que Francisco eligió a 108 de los cardenales presentes ahora en el Vaticano para votar. Benedicto XVI nombró a 21 y Juan Pablo II, a cuatro.

Hay que recordar que los cardenales electores que participarán del cónclave tienen que tener como condición menos de 80 años y cada uno de ellos está habilitado para ser elegido Papa. El nuevo sumo pontífice, para ser elegido, precisará de dos tercios de los votos de los demás cardenales, es decir, 87.

Las edades de los cardenales de este nuevo cónclave

Se da la particularidad de que varios de los candidatos con más fuerza a suceder a Jorge Bergoglio tienen edades más jóvenes que él cuando asumió en 2013 o que el propio Benedicto XVI al momento de su consagración papal.

Por ejemplo, hay 15 cardenales menores de 60 años (Juan Pablo II fue elegido con 58 años). En ese sentido, el más joven es el ucraniano Mykola Bychok, obispo en la ciudad australiana de Melbourne, de 45 años.

A su vez, 45 cardenales tienen entre 60 y 70 años. La mayoría, 73 de ellos, tienen entre 71 y 80 años. El de más edad es el español Carlos Osoro Sierra, de 79 años y cardenal arzobispo emérito de Madrid.

Cómo están representados los continentes en este nuevo cónclave

El continente que más representantes tiene es Europa, con 49 cardenales. Lo sigue América, con 37; luego Asia con 24, seguido de África con 19 y por último Oceanía, con 4 cardenales.

El pensamiento de los cardenales: sus corrientes

Además de las diferencias producto de sus nacionalidades, también los cardenales tienen diferentes formas de pensar y distintas corrientes de las que provienen.

Los diplomáticos

Tienen su vista colocada en el cardenal italiano Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano. Lo ven como el candidato ideal por ser moderado y capaz de poner orden en situaciones complejas.

Los moderados

Apoyan más al cardenal maltés Mario Grech, secretario general del Sínodo o también al luxemburgués Jean-Claude Hollerich, arzobispo de su país. También apoyan al español Cristóbal López Romero, arzobispo de Rabat (Marruecos), quien defiende el diálogo interreligioso con el Islam.

Los conservadores

Están los conservadores más ultra, como el guineano Robert Sarah y el estadounidense Leo Burke, aunque las posibilidades de que sean elegidos son muy difíciles. A su vez, el cardenal alemán Gehrard Ludwig Müller, que manifestó que el próximo Papa debería volver a revisar el tema de las bendiciones de las parejas homosexuales, entre otras cuestiones.

Uno de los candidatos con más aceptación entre los conservadores y también los moderados sería el húngaro Peter Erdo, arzobispo de Esztergom-Budapest.

Los de más cercanía a Francisco

Entre los más cercanos a Francisco está el filipino Luis Antonio Tagle, quien cuenta con un gran favoritismo. Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y con posiciones muy parecidas a las de Jorge Bergolio respecto a los homosexuales.

También el cardenal italiano Matteo Zuppi, el presidente de la Conferencia Episcopal italiana, quien fue enviado de Francisco para mediar en la guerra en Ucrania. Además, cuenta con experiencia en la resolución de conflictos como en Mozambique, Guatemala o Burundi.