El FMI vaticinó un crecimiento del 5,5% para Argentina en este 2025

El FMI vaticinó un crecimiento del 5,5% para Argentina en este 2025

“La economía argentina está experimentando una fuerte recuperación. Se ve apuntalada por mejoras en la confianza, en el crédito, los salarios reales y todo eso como resultado de un proceso de desinflación muy fuerte, con una inflación que se espera para fines de este año en un rango de alrededor de 18 a 23% de tasa anual”, consideró el economista en jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas.

Pierre-Olivier Gourinchas. el economista del FMI que habló sobre las perspectivas económicas de Argentina.

Fuente: https://www.diariopopular.com.ar/

El Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó este martes su actualización de perspectivas económicas globales, informe conocido como WEO por sus siglas en inglés. En el trabajo que se conoció días antes de la discusión en el directorio sobre la revisión de metas del programa del Ejecutivo a cargo de Javier Mileiel organismo decidió mantener para Argentina la proyección de crecimiento económico de 5,5% del PBI en este 2025.

El economista en jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, explicó los motivos para no modificar las perspectivas sobre la Argentina y proyectó que la inflación será “de 18% a 23%” en el corriente año. Fue durante la conferencia de prensa en la que presentó la actualización del WEO.

“La economía argentina está experimentando una fuerte recuperación. Este es ciertamente un desarrollo muy bienvenido. Se ve apuntalado por mejoras en la confianza, en el crédito, los salarios reales y todo eso como resultado de un proceso de desinflación muy fuerte, muy exitoso hasta ahora, con una inflación que se espera para fines de este año en un rango de alrededor de 18 a 23% de tasa anual”, consideró.

Luego, el representante del organismo internacional agregó: “Así que ese es ciertamente un contexto muy sólido para la economía argentina, y esa fuerte recuperación realmente viene después de un año 2024 muy desafiante. Y eso explica gran parte de la diferencia con el resto de la región”.

El crecimiento global fue proyectado en 3% para 2025 y 3,1% para 2026, según el último World Economic Outlook (WEO) del Fondo Monetario. Estas cifras representan una revisión al alza respecto de las proyecciones de abril: “El pronóstico para 2025 es 0,2 puntos porcentuales más alto” y “0,1 puntos porcentuales más alto para 2026”, detalló el informe.

Entre los factores que explicaron esa mejora, el organismo incluyó un adelantamiento mayor al previsto de operaciones comerciales por temor a nuevos aranceles, tarifas efectivas promedio más bajas en Estados Unidos, un debilitamiento del dólar y mejores condiciones financieras globales, además de expansiones fiscales en algunas economías relevantes.

El directorio del FMI sesionará esta semana y, de aprobar la revisión de metas de reservas y de superávit, algo que descuentan en el Gobierno libertario, enviará USD 2.000 millones al Banco Central. El organismo mencionó que el board discutirá el resultado de las negociaciones entre los funcionarios del equipo económico y el staff técnico sobre el final de julio y se espera que ese tratamiento tenga lugar este jueves.

Qué se espera para la economía global

El FMI advirtió que se aguarda que el crecimiento global se desacelere, en un contexto en el que se diluyen los efectos transitorios generados por las distorsiones comerciales. Las tasas previstas para los próximos años se ubican por debajo del 3,3% de 2024 y del promedio histórico prepandemia de 3,7%, aunque por encima de las estimaciones que figuraban en el informe anterior. Esta mejora fue generalizada, impulsada en gran medida por “una fuerte anticipación en el comercio internacional” y un entorno financiero más favorable a nivel global.

En cuanto a los precios, el Fondo proyectó que la inflación global bajará a 4,2% en 2025 y 3,6% en 2026, cifras similares a las del informe de abril. No obstante, el trabajo aclaró que “el panorama general oculta diferencias importantes entre países”. Las previsiones indican que en Estados Unidos la inflación se mantendrá por encima del objetivo de su banco central, mientras que en otras grandes economías la evolución de precios será más moderada.