Alerta por el Pipazo, una droga barata y adictiva que hace estragos en sus consumidores

Alerta por el Pipazo, una droga barata y adictiva que hace estragos en sus consumidores

Combina paco, restos de cocaína de baja pureza y sustancias químicas. Por su rápida expansión, aparece en numerosas investigaciones por delitos graves y homicidios. «Presenta conexiones directas con el crack», advierten.

La sustancia se consume con improvisadas pipas y los expertos advierten que genera daños irreversibles en la salud.

Fuente: https://www.diariopopular.com.ar/

Hay alerta por la llegada y rápida expansión de la droga conocida como el ‘Pipazo’, altamente tóxica, súper adictiva y muy barata que se fuma en pipas improvisadas, y viene haciendo estragos en distintos puntos del país. Este fenómeno parece imparable y su receta combina paco, restos de cocaína de baja pureza y sustancias químicas. Lo cierto es que está arrastrando a miles de jóvenes a una espiral de adicción y violencia. La sustancia ya aparece en numerosas investigaciones por delitos graves, incluidos homicidios.

Acerca del fenómeno, Claudio Izaguirre, titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina (AARA), afirmó que «lamentablemente el ‘Pipazo’ avanza en todo el país y presenta conexiones directas con el crack». «Es que su consumo -señaló- anula la parte frontal del cerebro y, a partir de eso, tenemos personas que se asemejan a un animal embravecido. Vemos delitos en el marco del consumo porque quienes consumen no pueden resolver conflictos sin agresión y a su alrededor sólo ven enemigos».

«Recordemos que es una sustancia de muy bajo costo económico. Es muy superior a otras drogas baratas, en términos del efecto que provoca y el nivel de adicción. Tenemos que decir que es necesario extremar los cuidados para que no continúe su expansión, por el momento imparable», advirtió.

El ‘Pipazo’ comenzó a llamar la atención en varias ciudades del país, sobre todo en las calles cordobesas, en la zona norte y en los asentamientos más castigados. Allí se multiplican los relatos de chicos que arrancan con la marihuana o el alcohol y rápidamente caen en el ‘Pipazo’, atraídos por su bajo costo y el efecto inmediato. El humo de esa pipa rústica, hecha muchas veces con caños de plomo, genera un «viaje» corto pero devastador. «En pocas semanas de consumo aparecen signos de deterioro físico, cuadros de ansiedad severa y alteraciones de conducta», advirtió el médico psiquiatra Gustavo Andrade, del hospital Neuropsiquiátrico de Córdoba.

La Justicia y la Policía también encendieron las alarmas. En operativos recientes, tanto en Córdoba capital como en el interior, se secuestraron cargamentos de esta mezcla en precarias «cocinas» barriales, donde se preparan dosis a precios irrisorios. «Es un negocio que prolifera porque no necesita logística grande ni distribución organizada. Con pocos elementos se produce y se vende en el mismo barrio», reconoció un investigador judicial.

Como se dijo, el avance del ‘Pipazo’ no se limita a Córdoba. En provincias como Santa Fe, Buenos Aires y Mendoza, los equipos de salud comunitaria ya registran consultas por adicciones vinculadas a esta droga. «Lo grave es que se trata de una sustancia de altísimo riesgo que genera dependencia inmediata. Vemos pibes de 12 o 13 años atrapados en el consumo», explicó la especialista en adicciones Carla Rivas, del Observatorio de Consumo Problemático.

En ese contexto, las organizaciones sociales denuncian que el Estado llega tarde. «Los chicos fuman porque no hay laburo, no hay contención, y esta droga está al alcance de cualquiera», sostuvo José Pereyra, referente barrial de Villa El Nylon, que reclama programas de prevención urgentes y más dispositivos de rehabilitación.

Mientras tanto, la droga avanza y deja un tendal de víctimas silenciosas: jóvenes cada vez más chicos, familias destruidas y barrios enteros que viven con miedo. El ‘Pipazo ya no es un fenómeno aislado. Es una realidad que se instala y amenaza con transformarse en una epidemia social.